Una de las búsquedas constantes de mi carrera como docente ha sido y es el encontrar una forma de motivar a mis alumnos y alumnas para que el aprendizaje de una lengua extranjera resulte lo más interesante posible, fomentando además en ellos la curiosidad y el interés por aprender.Mostrarles herramientas variadas y diferentes de enfrentarse a textos, diálogos y ejercicios escritos es una constante en mis clases, pero he de reconocer que los recursos se acaban y la falta de tiempo hace, a veces, que el aprendizaje no sea todo lo significativo que me gustaría.Buscando nuevas formas de enfrentarme a los contenidos , topé con algunos artículos de Javier Tourón sobre la metodología Flipped, convirtiéndome en asídua lectora de experiencias que seguían este modelo.Me resultaba muy llamativa la incorporación de diversas herramientas virtuales para una misma tarea , la elaboración de tareas que implicaban la aportación de diferentes enfoques por parte de los alumnos y la posiblidad de dedicar más tiempo a resolver sus dudas reales, fomentando una relación profesora-alumno más fructífera y equilibrada. Las dificultades son muchas al intentar poner en práctica este nuevo enfoque , y las dudas que surgen ante un cambio tan importante en la presentación y elaboración de contenidos y materiales también lo son, pero cuando se tiene tan claro que lo importante es avanzar para lograr una mejora en la caliidad educativa del alumnado y del profesorado, merece la pena dedicar tiempo a recibir la formación necesaria para llevarla a cabo.
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